Segunda vuelta

in Listado general
Por Fabián D´Amico

Ameno show humorístico musical sostenido por el talento e histrionismo de sus intérpretes.

Un frase trillada y muy habitual al hablar de teatro de revista es que el género está muerto, que la revista como se la conoció en su época de esplendor murió, que no hay actores, vedettes, guionistas y productores que se dediquen al mismo. Si bien, en cierto sentido, esto no es una falacia, siempre hay gente que apuesta a este tipo de espectáculos y en especial público ávido de ir al teatro a entretenerse. Como hacedor de espectáculos de corte revisteril, Nito Artaza intenta mantener algo de la esencia del género y genera shows con figuras conocidas y atractivas puestas en escena. Su última creación, Segunda vuelta- presentada en la temporada veraniega de este año en la ciudad de Mar del Plata- puede verse en el teatro Lola Membrives en una versión de gira.

La sala expectante genera un clima festivo. La fuerte música ambiental torna bulliciosa a la platea que comienza a hacer palmas. El telón se levanta y comienza una verdadera-y grata- sorpresa. Un pequeño paso de comedia con Milone vestida de novia abre el espectáculo que solo cuenta con tres intérpretes. No hay ballet ni orquesta, ni escenografía ni vestuario típico de estos shows. Solo tres intérpretes en uno de los teatros más importantes de la Av Corrientes, lugar habitual para las grandes comedias musicales y fastuosas producciones teatrales. Un humorista, un cantante-imitador y una figura invitada que colman con su histrionismo y arte la gran caja negra del escenario sin necesidad de ningún elemento ornamental.

Nito Artaza oficia de anfitrión e interactúa con la platea de manera continua en forma fluida e informal con sus ocurrencias, viejos chistes y alguna gracia novedosa. Sus intervenciones-festejadas y aplaudidas- dan pie a pequeños y efectivos cuadros musicales de Milone y Cherutti. Un par de sketches compartidos por el trio (con la consabida carga política y la eterna figura del Menen, que es marca registrada en Artaza) permiten el lucimiento de Cherutti como imitador con apenas alguna mascara y su voz como instrumento principal.

Cecilia Milone se destaca como cantante en cuadros temáticos, que van desde canciones de amor de su autoría para Artaza, recuerdos de las comedias musicales interpretadas por ellas y de aquellas que marcaron su vida y un logradísimo cuadro de tango, donde su versión de Frente al mar provoca una gran ovación de la platea.

Miguel Angel Cherutti, al igual que Milone tiene su momento tanguero pero es un su cuadro de imitación de cantantes famosos, a cara lavada y sin artilugios de maquillaje, donde alcanza su máximo lucimiento.

El único elemento negativo de Segunda vuelta es el pésimo sonido del espectáculo. Una inexistente ecualización, exceso de cámara en los micrófonos y una excesiva potencia del mismo afecta el brillante desempeño de los artistas.

Segunda vuelta es un ameno show humorístico musical donde el talento e histrionismo de sus intérpretes salvan cualquier falencia estética o falla técnica.